Hay hoteles que van más allá del descanso y con la llegada de la primavera, son lugares donde los jardines envuelven cada rincón, donde pasear entre árboles y senderos se convierte en parte esencial del viaje. Hoy te llevamos a cuatro alojamientos con encanto, todos de Rusticae. Donde el verdadero lujo está en el paisaje.
En plena naturaleza cántabra, este hotel combina diseño moderno y calidez rural. La madera, el lino y los tonos crudos dominan su interior, con mobiliario creado por artesanos locales. Algunas habitaciones tienen terraza privada y zonas comunes como la biblioteca o el salón con chimenea invitan a quedarse. Su gran jardín, con árboles centenarios, un estanque y un río, es el alma del lugar.
Ubicado entre la Costa Brava y los Pirineos, este hotel rodeado de bosques en una antigua finca agrícola ofrece 27 habitaciones elegantes, spa con sauna, piscina de agua salada, pista de tenis y restaurante de cocina catalana. Perfecto para descansar y explorar rincones como Besalú, Girona o el Parque Natural de la Garrotxa.
Esta casa de campo del siglo XVIII es perfecta para desconectar en familia o con amigos. Rodeada de naturaleza, la finca cuenta con varios espacios al aire libre: un jardín romántico, un jardín urbano, huerto, piscinas y un amplio patio donde disfrutar del buen tiempo. Tiene solo cinco habitaciones (cuatro dobles y una suite), todas con una decoración elegante y cuidada. El salón con chimenea añade un toque acogedor, y su ubicación es ideal para visitar ciudades con encanto como Guimarães, Braga o Amarante.
Ubicada en la tranquila localidad de Oreña, cerca de la costa cántabra, es un refugio perfecto para quienes buscan desconectar rodeados de naturaleza. Su rehabilitación ha respetado la arquitectura montañesa, utilizando materiales típicos de la región, creando un ambiente acogedor y lleno de calidez en sus 14 habitaciones, diseñadas para ofrecer paz y tranquilidad.
El hotel es el lugar ideal para explorar los alrededores, como las playas cercanas, bosques mágicos, rutas de senderismo y la histórica Santillana del Mar. Además, podrás disfrutar de la deliciosa gastronomía local.
Con su entorno natural, es un espacio donde los jardines y el paisaje verde invitan a relajarse y disfrutar del aire puro de Cantabria.
Ya sea para una escapada familiar, un retiro tranquilo o una reunión especial, estos hoteles con jardines ofrecen el refugio perfecto para disfrutar de la naturaleza. Cada uno de ellos, desde las casas rurales más exclusivas hasta los alojamientos de lujo, destaca por su capacidad para integrar el entorno natural con el confort y la belleza.
¿Estás listo para reservar tu próxima escapada y sumergirte en la paz de estos paraísos verdes?
