Es un hotel muy pintoresco,sus muebles y decoracion muy de epoca,pero en su conjunto es muy acogedor;tiene rincones muy chulos,y una terraza mirando al puerto,ideal para tomarte algo de noche.Esta muy centrico,al lado pasa el tranvia 25,hay tren y buses.tiene parking.Todo muy limpio,personal super atento.los desayunos en la terracita interior correctos.