Uncastillo por Dentro
Turismo en Uncastillo
Incluso antes de desayunar, empezar el día con un paseo por las callejuelas de Uncastillo es una maravilla y una forma de “prepararse” para el desayuno de La Pastora.
Una vez desayunados nos subiremos al Museo de la Torre en el Castillo. Allí volveremos a contemplar el pueblo, esta vez desde las alturas, y entenderemos por qué, cómo y cuando se originó el pueblo de Uncastillo.
Los bañales, una ciudad romana en las Cinco Villas
Nuevo viaje en el tiempo, esta vez a la época romana. A escasos 15kms y todavía en el término municipal de Uncastillo se encuentra el yacimiento de Los Bañales en Sádaba. Su auténtico nombre es todavía un misterio que tal vez pronto se resuelva. Los restos de edificios privados y públicos, unos baños romanos y restos también de un posterior poblado íbero constituyen un hito de la arqueología de la provincia de Zaragoza. A apenas 10 minutos a pie se alcanza el acueducto del que quedan unas sencillas pero imponentes columnas de piedra que sujetaron una canalización de madera. En algunos tramos el acueducto está excavado en la roca y recibe el nombre de specus, ¿lo sabías?
Comida: Restaurante en Luesia
Nos acercamos a Luesia para comer en el muy sencillo bar Puy Moné . Comida contundente sin lujos. Os recomendamos probar los “boliches de Luesia”, una judía autóctona sin piel a las que el microclima de la zona y el agua de los ríos de Luesia le confieren una finura extraordinaria. Precio medio: 15 euros por persona.
Pozo Pigalo, Luesia
Estamos en la parte más verde y agreste de la comarca. La tarde la dedicamos a ver algunos parajes emblemáticos. Por una pista forestal nos acercamos hasta el Pozo de Pigalo, a siete kilómetros de Luesia. Entre rocas, el agua del río Arba se abre paso y cae en cascada para después remansar en lo que se convierte en una increíble piscina natural, con distintas profundidades. Si el tiempo lo permite, un baño con salto desde las rocas, es una experiencia inolvidable.
Castillo de Sibirana
Volviendo hacia atrás encontramos el desvío hacia el Castillo de Sibirana, en Luesia y a 8 km de Pigalo, nuestra anterior parada. Una pequeña fortificación encaramada a una roca sobre la que mantiene un sorprendente equilibrio. La ausencia de señalización aumenta la sensación de descubrimiento de este mágico lugar.
Cómo llegar al Castillo de Sibirana: a 3 kilómetros de Pigalo en el camino de vuelta hacia Luesia, sólo hay que desviarse 2 kilómetros. De Pigalo a Luesia hay 8 kilómetros.
Barranquismo en Luesia
De vuelta a Luesia, el barranco de Siaskas ofrece una buena oportunidad para los que viajan con niños. Sin ninguna dificultad, es un pequeño recorrido donde iniciarse en el barranquismo infantil.
Puy Moné en Luesia
Desde Luesia tomamos esta vez la pista hacia Puy Moné. Discurre por el fondo del valle primero entre carrascas y luego entre pinos y hayas. Caballos y vacas aparecen aquí y allá. Poco a poco la pista nos encamina hacia la cumbre de Puy Moné (1.300m). Aquí los colores del atardecer resaltarán aún más la espléndida visión de 360º: Pirineos navarro y oscense, multitud de sierras del Prepirineo y, al sur, la silueta del Moncayo.
Cena: Restaurante en Biel
Nos acercamos a Biel donde nos espera El Caserío. Se trata de un bar oscuro sin ninguna concesión a la estética y donde nada ha cambiado durante décadas, nada excepto la oferta gastronómica. Lo ideal es dejarse aconsejar en varios entrantes tipo degustación y ser prudentes a la hora de pedir un segundo para no lamentar el no haber podido terminarlo todo. El precio medio es de 25 euros por persona.