Nuestra ruta nos lleva hasta el Geoparque de Granada, un espacio tan grande como la provincia de Soria del que es imprescindible comenzar haciendo una pequeña introducción. Realmente, para conocerlo necesitarías el tiempo que nunca se tiene, por lo que es muy recomendable contratar los servicios de alguna de las muchas empresas de ecoturismo del territorio. En este caso, Goyo Garrido nos acompañó con su 4x4 por lo más emblemático del Geoparque, según nuestras necesidades y tiempo, y nos ilustró con su sabiduría y pasión.

Reconocido por sus valores geológicos y paleontológicos como Geoparque Mundial de la UNESCO, también cuenta con un enorme patrimonio histórico, cultural, ambiental y paisajístico. A nivel europeo, se trata de uno de los paisajes menos alterados por la acción humana. Pliegues, fallas aún en activo, antiguas lagunas lacustres… nos relatan cómo se conformó la cordillera Bética, pero es que además cuenta con afloramientos muy singulares a escala mundial: sus sismitas.

Destaca la presencia de un importante conjunto de yacimientos paleontológicos, que nos muestran cómo eran los vertebrados continentales del Cuaternario europeo. Con más de 150 localidades identificadas, de entre ellas la Estación Paleontológica de Fonelas. Pero es que también encontramos algunos de los restos humanos más antiguos del continente europeo, con más de 1 millón de años de antigüedad (Orce). Sus miradores nos ofrecen un resumen visual de los diferentes aspectos geológicos y geomorfológicos —os recomiendo subir al del Puntal de Don Diego, en Gorafe, para vivir la majestuosidad de desierto de Gorafe—. ¡Espectacular! Finalmente, acoge un paisaje humanizado más que singular: viviendas excavadas en las rocas sedimentarias del Geoparque, las casas cueva que hoy ofrecen una amplia oferta de alojamiento rural.